Los lucernarios en la arquitectura representan una gran ventaja respecto a los temas de la iluminación, así como también en el diseño. Nos brindan grandes oportunidades en la estética de alguna habitación, así como también una vista increíble.
Según el diccionario de la lengua española, lucernario, claraboya o tragaluz, es una ventana que se ubica en el techo de una construcción, de manera que se pueda iluminar la habitación.
La ventaja de esto es que, al estar ubicado en una posición tan alta, superior a una ventana, se logra una iluminación mucho mayor, sin importar el tamaño reducido que se tenga.
Existen algunas variaciones de estos tragaluces, como algunos tubos de luz que se ubican debajo del techo, e iluminan a la habitación con luz natural. O, también se pueden encontrar los conocidos “lumiductos”, que son unos tubos que captan la luz del sol y la transmiten al interior de una habitación por medio del uso de un difusor.
En el caso de que queramos optar por este elemento constructivo en los techos de algún espacio, este nos brindará diferentes beneficios, como son:
Si deseamos optar por instalar este elemento en nuestro hogar, el procedimiento que se cumple es el siguiente: Inicialmente, se hace una apertura en el techo, y luego, se procede a colocar la ventana entre las vigas verticales. La medida normalmente utilizada para estas ventanas es de 55 cm.
Esta instalación, a su vez, puede darse con dos finalidades: como tragaluz, de manera que se instala en lo más alto del techo, o como una ventana.
Cuando es instalada con la intención de una ventana, esta debe ubicarse a cierta distancia del suelo. Por lo tanto, no debe estar mucho más allá de 90 cm con respecto al suelo.
Una opción para la instalación de nuestras claraboyas que, además, es económica y ecológica, viene de la mano de la tecnología “Spectralight infinity”. Esta ofrece una instalación rápida, es de fácil mantenimiento y no permite el paso del agua.
Otra de las grandes ventajas de esta tecnología es que permite un mayor paso de luz, comparado a lo que, normalmente, pasa por las claraboyas tradicionales. Esto nos permite tener un ambiente mucho más cálido y agradable, lo que resulta ideal en alguna empresa o negocio, ya que el lugar de trabajo se vuelve más agradable.
Este sistema se instala en las vigas del cielo raso y por eso no será necesario hacer ninguna modificación estructural. Tampoco es necesario hacer uso de algún aislamiento, de pintura o vierteaguas, e incluye un sistema de acople que se introduce en el techo. Estos sistemas de acople tienen variaciones dependiendo de la superficie del techo, por lo que se ajustarán a la perfección.
Todo buen proyecto nace de una buena ídea, y crece en base a una buena conversación.
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